Por el momento, se trataría de una prueba experimental y con un número muy limitado de envíos, pero ha servido para que el gigante chino del comercio por Internet, Alibaba, se haya adelantado a su principal competidor estadounidense, Amazon.
En concreto Alibaba ha comenzado a entregar pedidos de té mediante el uso de drones. Esta operación, más que un ensayo en condiciones reales y a gran escala, también ha servido como una buena publicidad para la marca de té Taobao. Esta compañía difundió hace unos días, una foto de un dron que transportaba uno de sus paquetes de té en una caja blanca.
Sólo se harán 450 entregas de estos paquetes de té de este tipo, mediante un vendedor seleccionado al azar de Taobao. La operación se lleva a cabo entre tres ciudades chinas: Pekín, Shanghai y Cantón. En China, el espacio aéreo está bajo control militar. La reducción de las restricciones que impone el Ejército Popular de Liberación y la liberalización del espacio aéreo no avanza al ritmo que a muchos les gustaría, por eso el país cuenta con pocos aviones ligeros y helicópteros en comparación con su inmenso territorio y su floreciente economía.
Alibaba, el gigante chino de Internet fundado por el emblemático Jack Ma, tuvo una entrada triunfal en la Bolsa de Nueva York a mediados de septiembre del pasado año, captando 25.000 millones de dólares. El grupo no esconde sus ambiciones de crecer a nivel internacional.
Amazon, por su parte, ambiciona hacer entregas de pedidos con drones y ha amenazado recientemente con deslocalizar una gran parte de su investigación en la materia fuera de EE.UU. si el regulador aéreo estadounidense no le autoriza rápidamente sus pruebas. Además precisó que puede hacer volar drones a más de 80 kilómetros/hora con paquetes de 2,2 kilos de peso. Por otra parte, Google no se queda atrás, y está poniendo a prueba también un servicio de entrega por drones, un programa que ha bautizado como “Project Wing”.