El frexting se está convirtiendo en la nueva tendencia entre las mujeres, el cual está causando furor en las redes sociales. El término nace de las palabras anglosajonas, ‘friend’ (amigo) y ‘sexting’, y que consiste en mandarse fotos muy subidas de tono vía mensajes, con la finalidad de obtener una retroalimentación positiva de su imagen.
De esta manera, se sube el autoestima si se reciben comentarios halagadores, aunque hay que tener cuidado de no recibir alguno que otro comentario negativo, si se a alguna amistad muy sincera.
En definitiva, el frexting tiene como finalidad que de vez en cuando alguien nos diga que estamos espectaculares. Eso sí, sin ninguna otra intencionalidad o con connotaciones sexuales o amorosas.
Para que tengamos claro, por ejemplo: tú te haces un selfie con un top exhuberante o en tu nuevo bikini para el verano y se lo pasas a uno de estos grupos de Whatsapp de súperamigas.
Allí muchas de ellas dirán, «qué bien te queda», «que cintura más delgada» o «que pechos más bonitos tienes». Y sin duda, tomarás estos piropos, halagos y críticas como ciertas, pues con un hombre lo tendrías algo más difícil ya que con el fin de conquistar, te mentirían descabelladamente para conquistarte.
O también en las redes sociales, para ver cómo tus comentarios de la instantánea son maravillosos. Todo ello nace de la cultura narcisista en la que estamos envueltos con todos las selfies que nos podemos hacer a lo largo del día y de los que necesitamos a toda costa que nos pongan nota o también una grave falta de autoestima.